Cerrado por vacaciones

Hola a todas! Las extrañé muuuuuuuuucho.
Aqui estoy de vuelta!
Es que me escapé por un mes a la costa y ni toqué una tecla de la computadora. No es increíble?
Para eso son las vacaciones, no? Para desenchufarse de todo, del teléfono, del stress de la ciudad, de los colectivos, del ruido y de la tecnología que nos tiene atrapados. Pero les aseguro que de algo no me desconecté, mis agujas y mis hilos me acompañaron y pude hacer un chalequito para un bebito de un amigo de mi marido. Primero tejí la espalda, luego los dos laterales y por último las vistas. Los botoncitos quedaron para la vuelta a casa porque no había llevado. En las fotitos pueden ver los laterales y la espalda sin unir y el resultado final sin botoncitos. En la foto en la que aparezco en el jardin estoy tejiendo uno de los laterales mientras tomo solcito. Ese día no hacía demasiado calor, pero por suerte había sol así que aproveché para sentarme afuera.
Un día una gatita apareció en nuestro jardín y pudimos compartir algunos días con ella, era chiquita, toda negra con una mancha blanca en el pecho. Así como apareció también un día desapareció y no la vimos más. Los chicos se lamentaban mucho por su ausencia pero los gatos son así, independientes. Mientras estuvo con nosotros, la alimentamos y la mimamos, sobre todo mis hijos que la llamaron Blackie.